Rehabilitación natural del cauce del Segura: la construcción de escalas de peces
Una gran cantidad de especies vivientes, flora y fauna dependen y habitan por los lechos fluviales. Como bien sabemos, cuando el hombre actúa en estos medios acuáticos, los sistemas biológicos tienden a variar fácilmente por ser vulnerables, lo que ocasiona una transformación brusca en dichos ecosistemas. Este panorama se refleja con la desaparición de ciertos seres vivos, lo que ocasiona una pérdida original del ciclo vital de la propia cuenca.
La intervención de la mano humana en los regímenes hidrológicos de los cauces fluviales ha producido alteraciones en sus corrientes naturales de agua, conllevando una súper regulación de su curso. Esto se debe en particular al establecimiento de obras transversales:
- a) Azudes para desviación de agua hacia acequias de riego con una altura de 2 a 10 metros.
- b) Presas de centrales hidroeléctricas instaladas principalmente durante finales del siglo XIX y principios del XX (de 2 a 10 metros de altura).
- c) Presas dedicadas meramente a embalses de más de 10 metros de altura.
A estos complejos de ingeniería hay que añadir estructuras de menor impacto, como puentes, vados o estaciones de aforo, que sirven para medición de caudal.
Organigrama Horizontal I. Tipos de pasos de peces.
Recuperado de: Confederación Hidrográfica del Ebro-Tecnoma Grupo Typsa. (s.f.).
Los azudes y las presas son tipologías constructivas que producen impactantes cambios en las características hídricas de los ríos, al afectar la dinámica de la corriente, la propia morfología del caudal y de la ribera, o el transporte de la sedimentación aguas abajo, entre otros aspectos.
Por otro lado, tales construcciones encadenan la limitación de la libre circulación de la fauna piscícola, lo cual origina una serie de consecuencias:
- a) Movimientos de menor recorrido a lo largo del cauce, lo que conlleva una reducción de adecuadas zonas para reproducirse
- b) Desaparición de la presencia de especies en el tramo superior del lecho fluvial
- c) Imposibilidad de colonizar nuevos territorios
- d) Disminución de la diversidad genética por el aislamiento de las poblaciones piscícolas.
- e) Esfuerzo de la fauna acuática para superar los obstáculos, donde pueden herirse, y que tras consumir sus reservar energéticas es posible que obtengan un aumento de su predisposición en enfermedades
- f) Desorientación de los peces por las condiciones hídricas (escasa o nula velocidad y mucha profundidad) al superar estos obstáculos.
Por tanto, estas estructuras impactan de modo negativo en el ciclo y la vida de los peces fluviales. Ello ha promovido la movilización e iniciativa de proyectos medioambientales para rehabilitar los lechos fluviales, a fin de devolverlos a su estado natural. Tales proyectos se han llevado a cabo gracias a la instalación de diferentes tipos de paso de peces (véase Organigrama I), los cuales han facilitado la conectividad de los tramos fluviales por medio de estas actuaciones de permeabilización en puntos donde se encuentran las citadas obras transversales.
Figura 1. Mapa donde se muestran los lugares donde se actuó para la rehabilitación del río
Segura, España. Fuente: IDERM, elaboración propia.
Ahora bien, un ejemplo de rehabilitación y recuperación fluvial lo podemos encontrar en ciertos tramos del río Segura, uno de los ríos más regulados de Europa históricamente y principal eje vital de la región de Murcia, España. Tal regulación se explica por medio de la constante actividad agrícola experimentada en las periferias del lecho (las vegas), mediante la implantación de sistemas tradicionales de riego (azud, y acequia) desde siglos remotos.
Asimismo, hay que añadir que durante finales de las centurias del XIX y principios del XX se comienzan a instalar centrales hidroeléctricas acompañadas por presas. Esta herencia legada en la actualidad supone, junto con la instalación de embalses, la presencia de numerosos obstáculos que irrumpen el flujo natural de la corriente, y dificultan los movimientos naturales de migración, dispersión y colonización de los peces. Por esta razón se originó e impulsó un proyecto conocido como LIFE + Segura Riverlink (2013-2017), cuyo objetivo principal fue mejorar y fortalecer la conectividad entre los ecosistemas naturales, devolviendo al río Segura su estado natural, actuando en áreas recogidas dentro de la Red Natura 2000 (además, tuvo otros objetivos, como la creación de una red de custodia del territorio para garantizar la sostenibilidad de las actuación; poner en marcha un exhaustivo programa de monitoreo que evalúa los resultados obtenidos, y facilitar su posterior trasferencia al resto de la cuenca y a otros ríos con problemática similar; o un programa de voluntariado y de educación ambiental para concienciar a la sociedad).
En específico nos centraremos en el territorio del pueblo de Abarán y sus respectivos límites (figura 1), donde encontramos en una distancia de casi 14 kilómetros dos tipos de pasos de peces: uno natural (área 1) y otro artificial (área 2).
Figura 2. Presa y azud del Menjú.
Fuente: elaboración propia.
En el área 1 nos encontramos con una presa, conocida como del Menjú (Cieza Bonica, 2015) (figura 2), que tenía una doble función durante el siglo XX y finales del XIX, y que ahora sólo tiene una finalidad: la de retener y desviar caudales hídricos para dos acequias históricas que riegan las vegas fluviales de las poblaciones de Abarán y Blanca: la acequia Charrara, construida a mediados del siglo (XVIII), y la acequia principal de Abarán y Blanca (unidos sus canales a principios del siglo XIX, pero datadas por separado durante el siglo XV).
Alrededor de 1900, esta presa comenzaría otra funcionalidad: desviar caudales hacia un canal que se dirigía a la central hidroeléctrica que existió en la zona y que hoy día se encuentra en ruinas. En este punto se realizó hace unos pocos años un paso naturalizado, que corresponde a un canal rústico, que incluye bloques, espigones y umbrales de fondo para reducir velocidad del flujo, a fin de que los peces puedan ascender con mayor facilidad. Este paso, como puede contemplarse en la figura 2, ofrece un camino alternativo por uno de los márgenes del río, con la finalidad de sestear el obstáculo. Sus ventajas resaltan por ser un medio excelente de integración natural. Sus desventajas tienen que ver con la necesidad de tener niveles de agua muy estables en la cabecera, que son una solución limitada para obstáculos mayores de tres metros; por tanto, la presa del Menjú tiene una altitud entre 2 y 3 metros; por último, necesita amplias zonas para trazar este tipo de pasos, rasgo que sucede en dicho paraje. El coste de ejecución puede variar entre 10 000 y 16 000 euros por metro de desnivel salvado. Por desgracia no sabemos el coste de su ejecución ni alcance medioambiental que ha podido alcanzar (figura 3).
Figura 3. Paso naturalizado o canal rústico junto a la presa del Menjú.
Fuente: elaboración propia.
Por último, en el área 2, aguas abajo del río Segura, se localiza la presa del Jarral (figura 4), estructura utilizada para desviar el agua hacia un canal que suministra a la central hidroeléctrica de Nicolás (Mimosa, s.f.), que actualmente está en funcionamiento. Su instalación también se realizó durante las primeras décadas del siglo XX. Su salto de agua varía entre los 3 y 4 metros de altura, por lo que la tipología constructiva de pasos de peces que mejor se adaptan a este tipo de altitud son las de escalas de artesas. En este caso, la tipología es una escotadura semisumergida, que consiste en una estructura donde internamente se comunican estanques escalonados, laterales y orificios de fondo situados en lados opuestos del tabique, alternando sus posiciones de un tabique a otro, siendo de un vertido semisumergido. Presenta una serie de ventajas e inconvenientes. Las ventajas se identifican como que hay un comportamiento óptimo frente a cambios del nivel de la lámina de agua, e incluso resalta por recoger caudales de funcionamiento amplio. Las desventajas tienen que ver con ser una obra de grandes de amplitudes de construcción: internamente se producen obstrucciones; el coste puede variar entre 15 000 y 25 000 euros.
Figura 3.Presa del Jarral y escotadura semisumergida.
Fuente: Confederación Hidrográfica del Segura (s.f.).
Para concluir, estos dos tipos de escalas de peces resultan eficaces cuando el pez puede encontrar la entrada, y franquear el obstáculo sin retrato, estrés o daño perjudicial en su migración río arriba. Para ello es necesario que tenga una buena ubicación y orientación de paso: siempre lateral o hacia aguas abajo, una atracción de paso, una poza de entrada y una salida de agua sumergida y con fuerza; características que cumplen las dos obras realizadas en el cauce del Segura a su paso por la localidad de Abarán. Como último referente es necesario indicar que necesitamos esperar dos años más para saber si estas actuaciones han servido para mejorar el cauce medioambiental del Segura.
Referencias
Cieza Bonica. (30 noviembre, 2015). El Menjú, un paraíso olvidado. Recuperado de http://www.ciezabonica.es/finca-el-menju-cieza/
Confederación Hidrográfica del Ebro-Tecnoma Grupo Typsa. (s.f.). Pasos de peces para permeabilizar estructuras transversales en la cuenca del Ebro. Recuperado de http://195.55.247.234/webcalidad/estudios/2009_Protocolo_Permeabilizacion_Obstaculos.pdf
Confederación Hidrográfica del Segura (s.f.). Life + Segura Riverlink (life12 env/es/1140). Franqueo fluvial. Recuperado de https://www.chsegura.es/chs/cuenca/segurariverlink/riverlink/
Mimosa. (s.f.). Hombres de Murcia: Don Nicolás Gómez Tornero. Recuperado de http://mimosa.pntic.mec.es/jgomez53/abaran/nicolasgomeztor.htm
Puedes contactar a los autores:
Juan Carlos Trigueros Molina, presidente del Centro de Interpretación Cultural de la Vega Alta del Segura. Doctor de Historia de Arte. Universidad de Murcia, España, This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Víctor Yelo López, secretario y coordinador del Centro de Interpretación Cultural de la Vega Alta del Segura. Alumno del Grado de Historia del Arte. Universidad de Murcia, España, This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Figura 1. La presa del Menjú. Abastece a la acequia principal de Abarán y Blanca, y a la acequia Charrara, España.
Fuente: elaboración propia.